Rock. Calma. Dormir.
Ya en la Edad Media, las cunas mecedoras dormían a los más pequeños. Pero no fue hasta el siglo XVIII cuando se inventó la mecedora para adultos. Hay varias teorías diferentes y contradictorias sobre cuándo, dónde y quién inventó la mecedora, pero muchos estudiosos creen que se inventó en América a principios del siglo XVIII.
Las mecedoras aparecieron simultáneamente en Inglaterra a principios del siglo XVIII. El término "mecedora" apareció por primera vez en el Oxford English Dictionary en 1787, aunque su popularidad no se generalizó hasta principios del siglo XIX.
A mediados del siglo XIX, un carpintero germano-austríaco llamado Michael Thonet inventó un proceso para calentar y curvar la madera, que se conoció como muebles de "madera curvada"; también se le atribuye la invención de una "línea de producción" para sus mecedoras de madera curvada. Todavía hoy existe una empresa de fabricación de sillas de oficina de quinta generación llamada "Thonet", debido a la invención de Michael de la mecedora de madera curvada en 1860.
Aunque la mayoría de las primeras mecedoras eran de madera y se utilizaban principalmente en el exterior, en los porches de las casas, la mecedora evolucionó hasta incluir acolchado y tapicería para mayor comodidad, y también se introdujo en el interior. En la década de 1960, el presidente John F. Kennedy popularizó la mecedora, ya que a menudo aparecía en una; le aliviaba el dolor crónico de espalda.
Entonces, ¿por qué una mecedora? Su capacidad para calmar y relajar es innegable. El movimiento rítmico de vaivén de una mecedora no sólo es reconfortante, calmante e inductor del sueño, sino que el ritmo también anima a pensar y reflexionar.
Esta tranquilidad tranquilizadora es la razón por la que, desde hace más de 100 años, la mecedora se ha convertido en un elemento básico en muchos hogares; ha adornado casas desde presidentes hasta artistas, y desde bebés hasta jubilados. Una vez que haya experimentado el suave movimiento de una mecedora, comprenderá su poder reconfortante.
La mecedora actual sigue proporcionando descanso y relajación, pero sus diseños actualizados se adaptan perfectamente a la estética moderna. La mecedora Monte Joya ofrece un respaldo alto, una tapicería experta y un balanceo relajante, ideal para relajarse después de un largo día o para ayudar a los más pequeños a conciliar el sueño. Su asiento suave y confortable, su base de madera mecedora de hermoso acabado y sus lujosas opciones de tela hacen que la mecedora Monte Joya sea tan cómoda que no querrá levantarse; sólo querrá mecerse... y seguir... y seguir.